Controversial hallazgo de muros y escalinatas Incas en la Calle Mantas del Cusco

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En Cusco todo es controversia y controversial por estos días, sobre todo cuando tiene el membrete de "Inca" o "Patrimonio", hace poco más de un mes se dio la noticia por parte de las autoridades de la Comuna del Cusco de que se habían encontrado parte de un muro Inca y escalinatas al momento de intervenir la Calle Mantas por obras de Agua y Alcantarillado en dicha arteria principal de la Plaza de Armas.

No es ningún descubrimiento el poner en evidencia que Oh Sorpresa debajo de las casonas españolas y de las calles de ciudad imperial yacen los vestigios de la antigua capital del imperio, es por ello que no me siento sorprendido en lo absoluto por el hallazgo, lo cierto es de que ha habido una serie de críticas y lluvia de comentarios adversos en las redes sociales por la decisión que ha tomado la Municipalidad del Cusco y el Ministerio de Cultura de soterrar el hallazgo después de darle el debido tratamiento de mantenimiento y cuidado al mismo.

Muchos paisanos míos en la ciudad del Cusco han elevado su voz de protesta al cielo y a los Apus y divinidades Incas para que no sean soterrados y algunos más extremistas desean ver la misma plaza de armas del Cusco llena de arqueólogos desenterrando los cimientos de lo que la conquista no pudo borrar ni quitar de raíz. Bueno hoy en día se escucha de todo y especialmente de las personas que creen que eso es una solución factible, es necesario pues analizar un poco más las implicaciones que esto tendría. La Calle Mantas es una de las principales arterias que acceden a la Plaza de Armas del Cusco dado que todo el flujo de automóviles que discurren por la Avenida El Sol la principal vía del Centro Histórico del Cusco desembocan en la Plaza de Armas por esta vía.

Para muchos de los cusqueños nos es familiar el tema de que hay terribles congestiones por que hay un desfile o por que han cerrado alguna calle en el C.H. de la ciudad, a mi mente viene la fecha en la que desplomó una casa colonial en la Calle Zetas impidiendo el paso desde Limapcpampa hacia la Avenida El Sol y la espantosa congestión que esto ocasionaba, y es que las ciudades españolas del Siglo XV y XVI fueron pensadas para el flujo de caballos y muy pocos carruajes y no para el flujo de automóviles así de simple. Antes de simplemente hacer una pataleta mediática como las que estamos acostumbrados a ver en el Cusco por temas como la colocación de un monumento de un Inca sobre un pileta republicana con tritones y elementos ajenos a dicha escultura o el petitorio del Ministerio de Cultura por quitarlo mismo que no fue atendido y que fue hasta judicializado, hasta las protestas por la construcción de un Mall en una zona alejada del C.H. de la ciudad, mismo que causo la molestia quejas y ataques de todo tipo por parte sobre todo de la prensa basura de la ciudad del Cusco, mismo que ahora van a comer su pollo en Kentucky Fried Chicken o su hamburguesa en Bembos.

Para seguir con más pataletas patrimoniales habría que hablar del tema del Hotel Marriot, donde se acuso a la constructora de haber destruido muros Incas y que dichas piedras habían sido arrojadas en basurales durante la noche y la madrugada para ocultar el el hecho, tanto así escalo el problema que la obra hasta corría riesgo de ser detenida suspendida y cancelada definitivamente, el Alcalde llamó a los congresistas del Cusco y las autoridades de Cultura y a la mismísima UNESCO para corroborar los daños que se hicieron y el atentado contra el patrimonio. El desenlace de esto es que fueron enviados peritos de la UNESCO desde Europa para constatar realmente si se habían cometido daños al patrimonio de la humanidad. La conclusión de los mismos fue la de felicitar a la empresa constructora por su compromiso con el respeto a los restos y hallazgos arqueológicos del lugar así como la puesta en valor y los museos de sitio de restos Quillques e Incas. Y se concluyo basado en la tesis del Arquitecto Solaligue de la UNSAAC del Cusco que el muro que se había acusado de haber destruido se trataba de un muro sin valor alguno de restos republicanos, españoles y contemporaneos de materiales como adobe piedra y hasta cemento que no tenían ningún valor patrimonial.

Lamentablemente en el Cusco el periodismo siempre se encarga de hacer escándalos mediáticos con temas de supuesta defensa del patrimonio y esta no es ninguna excepción. Antes de seguir los alocados sueños de algunas personas que creen que es cusqueñismo puro destapar la plaza de armas de la ciudad para encontrar vestigios arqueológicos Incas es necesario comprender que las autoridades no pueden realizar intervenciones que vayan en contra del interés colectivso como lo son la congestión vehicular o el acceso por parte de los turistas al C.H de la ciudad y las personas que serían perjudicadas como los que viven en Saphi o que se dirigen hacia la zona de Santa Ana entre otros. Peatonalizar el C,H. del Cusco es una necesidad pero usando el cerebro y los conocimientos técnicos para hacerlo y no por decisiones viscerales de la noche a la mañana.

Creo que si las autoridades y el Ministerio de Cultura tienen la capacidad de hacer una obra en la cual no vayan a afectar el transito por esta arteria y puedan hacer un acceso subterráneo que permita a los visitantes extranjeros visitar el lugar y ponerlo en valor entonces meritaría tal inversión, pero si no están en tal capacidad operativa como de hecho no lo están entonces el procedimiento es preservarlo y soterrarlo de nuevo así de simple y no hay por que rasgarse las vestiduras por ello.

Ya se ha dado una intervención algo parecida antes, en la Plaza Limacpampa y cual ha sido el saldo, que simplemente las personas no tienen la cultura necesaria para entender cosas tan elementales como que un museo no se daña, ensucia o destruye sino que se debe cuidar, el primer día de su inauguración las paredes ya estaba sucias las fotos y vidrios llenos de manchas de grasa de los dedos a pesar de los carteles de "No tocar", al mes las puertas de vidrio fueron quebradas a pedradas y no se sabe quien lo hizo ni a nadie le importó y no se tiene la capacidad operativa ni el presupuesto necesario para mantener eso. En conclusión el sitio fue abandonado y olvidado hasta nuestros días. Para eso vamos a intervenir la calle Mantas para que en unos años se convierta en otra ruina contemporánea post-moderna espero que no.

Insisto si no hay capacidad de realizar dicha obra ni mantenerla deben simplemente soterrar el lugar ya que es la mejor manera por el momento de preservarla.