Catástrofe nacional y problemas claros de falta de prevención y corrupción

Después de 25 años volvemos nuevamente a sentir los embates del fenómeno del Niño ahora bautizado como Niño Costero, en medio de escándalos de corrupción, de historias que embarran a los últimos tres gobiernos, con compras millonarias de satélites que no nos sirven y de falta de prevención y además ante todo un huayco de corrupción que remece los pobres cimientos de un poder estatal incompetente.

Hace unos años vaticinaron que la primera ciudad del mundo en quedarse sin agua sería Lima y creo que están muy cerca de lo cierto, Lima con sus poco más de 9 millones de habitantes la mayoría de ellos viviendo en condiciones precarias y de pobreza se ha visto a causa de estos ríos de barro que arrasan todo a su paso lo que es la falta de agua, los sectores más poblados de la capital se han quedado sin agua por casi 5 días, la gente ha llegado al nivel de histeria colectiva acaparando toda el agua de los supermercados, y llevándose hasta el agua de piletas públicas, desesperados y sedientos son recién ahora consientes de la importancia de no contaminar de no arrojar basura a los ríos. Incluso las zonas residenciales de la Lima rica se han quedado sin suministro y aunque algunos más preocupados por el tema de lavado de ropa, aseo personal y demás que de las personas que pasan hambre y frío en el Norte del país con el agua hasta el cuello pues creo que nos ha tocado sufrirlo a todos y tomar un poco más de conciencia de que la prevención y el consumo racional del agua es un tema importantísimo.

Pero no es momento de pensar en lo político sino de unir fuerzas para salir adelante como siempre lo ha hemos hecho, desde la época de la antigua cultura Mochica las grandes inundaciones en el desierto costero del Norte del país han arrasado con sus ríos de lodo todo a su paso, me pregunto si esperaremos que pasen otros 25 años para que vuelva nuevamente este fenómeno a arrasar todo a su paso, cuencas colmatadas, viviendas construidas en los cauces de los ríos, invasiones, informalidad, municipios corruptos que han permitido que todo esta sea un fenómeno a mayor escala de lo que podría ser, una vez más la falta de prevención salta por todos lados.

Esperaremos 25 años más para que el Niño nos pase por encima o por fin haremos alguna vez las cosas bien, es una pena lo que ocurre con nuestros compatriotas pero quizás es más indignante como algunos politiqueros del partido de color naranja van a hacer proselitismo político con la desgracia humana, una vergüenza lástima que esto agrade a las masas fácilmente manipulables por su gran nivel de ignorancia, la misma que es un lastre para este país.

Mi sincera solidaridad y condolencias con todas las personas que lo han perdido todo, sus campos de cultivo, sus viviendas, hasta su ropa y sus cosas y que no han recibido hasta el momento ayuda de nadie, ni del estado ni de el fujimorismo amarillista.

Fuerza hermanos de todo el país que están pasando momentos tan complicados.